Sabias la sensación tan bonita que es la de dar?
Cuando das contemplas la felicidad y alegría en esa persona y eso a mí me llena. Yo he sido la causante de esa sonrisa, de ese agradecimiento.
Por eso me encanta dar, porque me siento feliz dando, y cuando recibo es el doble de alegría.
No hay que tener mucho dinero para dar. No va asociado. Simplemente te hace falta voluntad. Puedes dar un elogio, puedes dar una carta escrita con tus manos, puedes dar un abrazo, dar unas palabras de consuelo, hay muchas cosas que puedes dar.
Y una vez la otra persona las recibe es espléndido ver esa cara de sorprendido, de agradecido, ver esa cara que pasa de la tristeza a la alegría por el simple hecho de haber dado algo.
Es maravilloso probar vosotros también el dar.
Ya me contareis
Cuando das contemplas la felicidad y alegría en esa persona y eso a mí me llena. Yo he sido la causante de esa sonrisa, de ese agradecimiento.
Por eso me encanta dar, porque me siento feliz dando, y cuando recibo es el doble de alegría.
No hay que tener mucho dinero para dar. No va asociado. Simplemente te hace falta voluntad. Puedes dar un elogio, puedes dar una carta escrita con tus manos, puedes dar un abrazo, dar unas palabras de consuelo, hay muchas cosas que puedes dar.
Y una vez la otra persona las recibe es espléndido ver esa cara de sorprendido, de agradecido, ver esa cara que pasa de la tristeza a la alegría por el simple hecho de haber dado algo.
Es maravilloso probar vosotros también el dar.
Ya me contareis
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